Lugares que ya no existen CDMX/ Discoteca Lobohombo, famosa por la tragedia del 2000
Calificada como una de las mejores discotecas en los 80 y 90, se transformó en el averno donde fallecieron 22 personas.
Por Alejandro Pohlenz
Era una selva (literal) de espuma de poliuretano altamente inflamable. A la disco Lobohombo (su nombre se refiere al hombre lobo, obviamente) ubicada en la San Rafael acudían celebridades, hombres de negocios, personas del mundo del espectáculo y “jóvenes de élite” (antes los llamaban pirrurris); en otras palabras, “la crema y nata” del Distrito Federal. Además de su operación “normal”, en el antro (antes les llamábamos disco) se instituían eventos especiales y frecuentes fiestas privadas, que, cuentan, eran auténticos aquelarres.
¿Cuándo empezó el Lobohombo?
Lobohombo inició en los 80. Sus dueños fueron los empresarios Alejandro Iglesias y Antonio Grez; era un espacio muy grande y tenía lo más non-plus-ultra-top en equipos de sonido, de video, luces, láseres y efectos especiales. Arriba, en una especie de terraza circular se podían ver a chicas atractivas bailando al compás de la música disco.
Era, según algunas fuentes, “la discoteca más moderna de América Latina”. Sí, era un gran antro, pero, también, una gran trampa. Después del incendio acaecido el 20 de octubre de 2000, se develaron cuantiosas irregularidades.
Anomalías mortales
Para empezar, el antro estaba funcionando después de la hora permitida: a las 5 y minutos de la madrugada. Había una fiesta privada. En segundo lugar, como comenté, todo estaba revestido de poliuretano, no solo como la selvática decoración, sino para sofocar el sonido. En tercer lugar (y eso exponenció la tragedia) las puertas de emergencia estaban cerradas con candados (para que no se fueran los clientes sin pagar).
22 muertos y 40 heridos dejaron la negligencia. Actualmente, en el sitio del infausto Lobohombo, se encuentra una estación de bomberos: esos, que arriesgaron su vida para extinguir el Infierno.
Desaparecido Permanentemente
Dirección: Avenida Insurgentes Norte 95, colonia San Rafael, CDMX.
