Lugares que ya no existen / Medusas, la disco de música electrónica más importante de los 90
Después del incendio del Jubileé, un DJ y un empresario tuvieron la fantasía de diseñar una disco dedicada exclusivamente al electro.
Por Alejandro Pohlenz
Es imperativo que inicie esta nota admitiendo varias verdades: 1, no recuerdo al Medusas; 2, no me gusta la música electrónica, la considero repetitiva y no la entiendo y, por tanto, 3, nada sé de este tipo de música. Otra admisión de culpa: hay un artículo completísimo sobre el medusas en Vice y tuve que consultar gran parte de los términos que ahí publicaron. Principiemos con la palabra “clubber”. En la búsqueda de información sobre el significado de esta expresión, leí algo que me dejó igual: “un raver y un clubber no son sinónimos… Los clubbers son (…) bastante cerrados y elitistas (…) salen bien bañaditos y perfumados (…) al borde de ser metrosexuales…” En el diccionario “Collins” dice simplemente que los clubbers son personas que acuden regularmente a night clubs.
El inicio del Medusas
El Medusas despegó el 20 de mayo de 1993 y fue concebido por Ricardo Silva (DJ Akme) y Rafael Rojo de la Vega. La tocada estuvo a cargo de un dueto llamado LLT (que antes se hacían llamar Los Legendarios Tlaconetes). Hagan de cuenta que me están hablando de física cuántica o de las extrañas costumbres de una tribu del Amazonas: obvio, no sabía que existía el DJ Akme ni Los Legendarios Tlaconetes. “Medusas inició con música (…) post punk y synthpop” (¿qué?) Antes de El Medusas habían existido el Bar el 9, Dynamo Garage, Pericos y Tutti Frutti. (¡Conocidísimos!).
El clímax y el desenlace
La pista de baile tenía la peculiaridad de elevarse; para abrirla había un performance con bailarines profesionales. Se usaban jaulas. Tuvo su gran apogeo cuando cundía la prohibición de las fiestas rave, debido a que la gente prefirió regresar a la seguridad de un club (era eso o ser golpeado por los granaderos).
Medusas murió en el 2000. Dicen que por diferencias entre sus socios. “atrás quedaron las noches intensas de techno, house, ebm, trance…” (Ni la menor idea de lo que están hablando). Se acabó, pues, este antro de San Ángel dedicado a la música electrónica, después de 7 cortos años de vida.
CERRADO PERMANENTEMENTE
